SITUACIÓN NACIONAL
El proceso de cambio que encabeza el Presidente Kirchner está atravesando una etapa marcada por algunas luces amarillas. La oposición comenzó una ofensiva con la intención de desgastar al Gobierno y construir una alternativa política que les permita recuperar el terreno perdido en el último tiempo. La consolidación del MERCOSUR, la permanente voluntad de distribución de la riqueza y el protagonismo de los sectores populares, entre otras medidas del Gobierno, generaron la reacción de los espacios de poder que estuvieron ligados al modelo de los 90´.
De esta forma comenzaron su agrupamiento, intentando profundizar las contradicciones que existen en el frente de Gobierno, para debilitar y dividir al Campo Nacional y frenar el avance del pueblo.
El hecho político del 25 de mayo fue una bisagra en este proceso. El arco de fuerzas que se expresó en la Plaza fue muy amplio, porque articuló a los Gobernadores, los Intendentes del conurbano bonaerense, los sindicatos, los sectores políticos ligados a la concertación plural y las organizaciones sociales. Pero la expresión social principal de esa movilización fue la de los trabajadores, subocupados o desocupados en su mayoría. Con esa porción social no alcanza para construir el Movimiento Nacional ni llevar adelante el Proyecto Nacional que nos proponemos.
Juventud Peronista Evita
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Desde el 25 de Mayo en adelante, el Frente de Gobierno viene recibiendo un golpe tras otro. La oposición trata de sacarnos un pedazo de la Plaza y aunque los sectores que fueron a la plaza siguen junto a Kirchner, empiezan a notarse ciertas contradicciones en nuestro propio campo.
Con la candidatura de Lavagna intentaron sacarnos parte del armado político vinculado al PJ. Después hicieron la avanzada de Blumberg, que buscó quitarle a Kirchner el respaldo de los sectores medios. Luego resurgió la tensión con la Cúpula de la Iglesia, que se opone a la aplicación de las leyes de salud reproductiva y las políticas de educación sexual. El supuesto secuestro del testigo Julio López, y la ola de amenazas que le siguieron, provocaron que un sector del progresismo y la izquierda responsabilice al Gobierno Nacional por este hecho. Los sucesos de San Vicente son la excusa de “Los Gordos” y Barrionuevo para atacar a Moyano. El triunfo de la oposición en Misiones es también parte de esta serie de luces rojas que van apareciendo en el camino.
Todas estas maniobras, con mayor o menor grado de articulación entre sí, apuntan a lo mismo: Desgastar al Gobierno Nacional, desestabilizar su base de sustentación, deslegitimarlo socialmente, dañar la adhesión popular que hoy tiene este proceso de cambios que encabeza Kirchner.
Sumado a lo anterior, asistimos a un proceso de transición de un modelo de acumulación económica basado en la exportación de capitales hacia otro modelo de acumulación, con base en la producción y la exportación de materias primas que todavía no está definido.
Al no estar definido el modelo económico, tampoco esta definido el modelo insitucional que lo expresará. Sin nuevas instituciones, todavía es difícil vislumbrar el nuevo sistema político que determinara este proceso histórico.
Para construir la fuerza capaz de cambiar la Argentina es necesario y desarrollar la organización popular para profundizar la redistribución del ingreso y distribuir el ingreso para profundizar la organización popular. En este marco, el conflicto social que hoy es refractario al Kirchnerismo debe ser incorporado al Estado y transformado en la organización popular que sustente este proceso.
Juventud Peronista Evita
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Construir Poder Político para dinamizar el Movimiento Nacional
La implementación del modelo neoliberal dejó consecuencias nocivas en los jóvenes de la Argentina y entre ellas hay una fundamental: la juventud no está integrada en forma masiva a la construcción de un proyecto político de Liberación Nacional, y esto quedó demostrado en el acto masivo del 25 de Mayo.
Algunos sectores políticos pretenden resolver este problema metiendo a los jóvenes bajo el ala de algún referente y atarlos a la suerte individual de este último. Otros pretenden disfrazar el problema y encajonarlo en una discusión por el cupo juvenil en el marco de la institucionalidad, frenando de esa forma toda la capacidad transformadora de la juventud. Algunos ilusos, un poco más voluntaristas pero tan liberales como los anteriores, pretenden construir experiencias sociales juveniles y acumular algo de lo organizado en algún ¨ partidito de vanguardia ¨.
Todos llevan a la Juventud a una política sectorial, que nos margina de la disputa por el poder real en la Argentina. Convierten a los jóvenes en administradores de intereses que no aportan a la construcción del Movimiento Nacional.
Nuestro rol
Este proceso político sólo puede tener una resolución favorable para el pueblo si logramos construir el Movimiento Nacional, organizando al conjunto de los sectores sociales, políticos, económicos y culturales de nuestra Patria con un objetivo común: el Proyecto Nacional, bajo la conducción del Presidente Kirchner.
Nuestro rol es construir poder político y fuerza popular organizada, para aportar a resolver dos tareas centrales, que son a la vez contradictorias y complementarias entre si:
Construir el Movimiento Nacional.
Dinamizar al conjunto del Movimiento Nacional.
Juventud Peronista Evita
jotape_evita@yahoo.com.ar
1. Construir el Movimiento Nacional
En la Argentina, los sectores que apoyan el proyecto del Presidente se encuentran fragmentados y, en algunos casos, enfrentados entre sí. Muchos de ellos pretenden seguir con la lógica de acumulación de la década pasada, donde cuidan su ¨ quintita ¨ para tener un espacio en la repartija institucional, y sin querer actúan en oposición a la consolidación del proyecto político de Kirchner, porque para avanzar es necesario quebrar todas las ataduras con el pasado.
Por eso creemos que es fundamental construir el Movimiento Nacional y estamos convencidos de que esta es la tarea principal de la etapa política actual, por sobre otras necesidades. Nada debe detener la unidad de los sectores nacionales, porque tenemos un Proyecto de país con el Presidente encabezando la búsqueda de la Justicia Social, la Independencia Económica y la Soberanía Política.
2- Dinamizar al conjunto del Movimiento Nacional
Darle proyección revolucionaria al Movimiento Nacional implica pararse sobre el conflicto social y resolverlo a través de la organización popular, brindándole conducción política y objetivos estratégicos a la organización popular construida hasta el momento.
Nuestra gran ventaja es que no tenemos ningún kiosco que cuidar, no estamos atados a ninguna estructura política liberal. Los sectores juveniles que nos integramos a la política lo hacemos para terminar con los padecimientos que nuestro pueblo tuvo en los 90 y construir una Patria para todos.
No importa el sector social del que provengan los jóvenes, lo que importa es la voluntad de transformar ésta realidad que vivimos.
El sueño de cambiar la Patria deja de ser una fantasía cuando lo transformamos en acción política de masas. La JP Evita no tendría razón de existencia si nuestros objetivos fueran otros.
Juventud Peronista Evita
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